Ferrer dedicó a su padre el título de Hijo Predilecto de Santander
El publicista y escritor, emocionado y con lágrimas en los ojos, firmó en el Libro de Honor del Ayuntamiento en presencia de familiares y autoridades
Emocionado, con la voz quebrada y lágrimas en los ojos agradeció ayer el empresario, publicista y escritor Eulalio Ferrer (1921, Santander) la concesión del título de Hijo Predilecto de Santander con un brillante discurso que dedicó a su padre. En el acto estuvo acompañado por su mujer, Rafaela, su hija y varios nietos. Un largo aplauso coronó la ceremonia.
Eulalio Ferrer estuvo en la tarde-noche de ayer en el Real Sitio de La Magdalena acompañado por familiares, amigos y personalidades del mundo de la cultura y la política. Entre los invitados estaban la vicepresidenta del Gobierno regional, Dolores Gorostiaga y varios consejeros, el Delegado del Gobierno, el presidente del Parlamento de Cantabria, el Presidente del Tribunal Superior de Justicia de Cantabria, diputados y senadores y los rectores de la Universidad de Cantabria y de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, entre otros.
Santanderino de la calle Cisneros, pero afincado en México, creó el primer grupo de comunicación en lengua española de América. Ayer, no se olvidó de nadie y comenzó su discurso agradeciendo el nombramiento al alcalde, «no sólo máximo representante de Santander, sino amigo personal», a los 27 miembros de la corporación municipal ayer presentes en el acto, que por unanimidad aprobaron concederle este título y a la Fundación Bruno Alonso que patrocinó su candidatura. Declaró estar «deslumbrado por cuanto significa y honra» el título de Hijo Predilecto, la distinción máxima a la que puede aspirar un santanderino. «Si de algo puedo enorgullecerme -continuó- es de haber sido fiel a la tierra en que nací, haciendo de ella un pasaporte de vida; insignia y jalón de sus principales aconteceres; voz y fe de identidad imborrables: igual en la confidencia personal, que en la palabra escrita y en el testimonio público».
Empresario, publicista y escritor, declaró que siempre ha estado alentado por el ideal cervantino de que ningún hombre es más que nadie sino hace más que nadie. Declaró que «amar y servir a esta tierra desde la distancia geográfica y obligada tiene algo de doloroso por no estar donde se quiere estar», aunque también reconoció que «tiene mucho de encantamiento por el gozo insospechado de una memoria que todo lo magnifica y ennoblece».
En su discurso de agradecimiento, Eulalio Ferrer tuvo una emotivas palabras de recuerdo para su padre. «Mi padre, el hombre que me enseñó, literalmente, las primeras letras sobre las cabeceras de los periódicos que llevaba a nuestro hogar, al regreso de sus jornadas de trabajo como tipógrafo. Permitidme que rinda homenaje filial a este hombre que fue teniente de alcalde de este ayuntamiento». «Gracias a su espíritu solidario y sentido ético, soy el que con su influencia determinante ha hecho posible que hoy reciba este nombramiento».
Para terminar, leyó unas bonitas palabras: «tú eres mi nombre predilecto; con mi predilección te he querido; queriéndote te he buscado; buscándote te he encontrado; encontrádote te he amado; amándote te he colocado en mi corazón por encima de todo». Y finalmente, estampó su firma en el Libro de Honor del Ayuntamiento de Santander
Seis títulos en cien años
Eulalio Ferrer recibió el título de manos del alcalde de Santander, Gonzalo Piñeiro, quien recordó que en los últimos cien años tan sólo cinco personas han recibido la máxima distinción de Santander. Se trata de Concha Espina (1924), el Cardenal Herrera Oria (1965), José Simón Cabarga (1966), Luis Redonet López Dóriga (1968) y Leopoldo Rodríguez Alcalde (1980).
«La propuesta de distinguir a Eulalio Ferrer, casi un cuarto de siglo después de concederse el último título de Hijo Predilecto, no mereció duda alguna», apuntó. La concesión del título fue aprobado por unanimidad el pasado 1 de julio en un pleno en el Ayuntamiento de Santander. Los 27 miembros de la corporación municipal (PP, PSOE y PRC) presidían ayer el salón de actos de las Caballerizas de La Magdalena.
Piñeiro calificó a Ferrer de ser durante toda su vida «uno de los mejores embajadores que ha tenido esta tierra montañesa», «un hombre hecho a sí mismo, con el firme propósito de servir a los demás».
El alcalde de Santander hizo un breve repaso de lo que ha sido la vida laboral de este prestigioso publicista y escritor y entre sus trabajos, destacó la donación del Museo del Quijote a la ciudad mejicana de Guanajato.
«Eulalio Ferrer es un triunfador -añadió Piñeiro- porque ha sabido llevar adelante con tesón y esfuerzo las iniciativas nacidas de su natural inteligencia y planteadas con la convicción y firmeza que le caracteriza».
Piñeiro también tuvo palabras de elogio para la mujer de Eulalio Ferrer, Rafaela, de quien dijo que «ese afecto que tú siempre has demostrado por nuestra tierra y que has simbolizado perfectamente en tu prolongada relación con tu esposo y compañero ha calado muy hondo entre nosotros y por ello, te queremos y respetamos como a una santanderina más».
Como reflexión personal, Piñeiro aseguró que para él no hay mayor satisfacción que ser alcalde de la ciudad en la que ha nacido, en la que se ha casado y en la que han nacido sus hijos y destacó que «mi trabajo está más que recompensado sólo por la oportunidad que me ha brindado el azar de la vida de haberte conocido».
El alcalde terminó su discurso afirmando que «a lo largo de su vida nos ha dado a todos un ejemplo de humildad, amor y diálogo». Al finalizar sus palabras, Gonzalo Piñeiro entregó el título de Hijos Predilecto de Santander a Eulalio Ferrer entre los aplausos de los asistentes.
Fecha: | 03/08/2004 |
Fuente: | Diario Montañés |
Autor: | Dolroes Gallardo |